El Cambio
Climático y la contaminación del aire, suelos y agua, tanto regional como
local, son causados principalmente por el uso excesivo y sin normas de
combustibles fósiles; la energía hoy no se está produciendo, transportando y
consumiendo de forma sustentable. La transición a un mundo que utilice fuentes
de energía renovables para impulsar el desarrollo económico y social y acorde
con el respeto al ambiente es considerada indispensable a nivel mundial. Desafortunadamente,
este cambio no puede ser abrupto. El reto es encontrar las trayectorias
tecnológicas que permitan realizar dicha transición elevando la calidad y nivel
de vida de los pobres y sin reducciones significativas en el bienestar de los
más desarrollados.
Greenpeace
Internacional, el Consejo Europeo de Energías Renovables y el Consejo Global de
Energía Eólica, publicaron, en julio de 2012, la 4ª edición de su Escenario
Energético Mundial (Energy [R]evolution: A Sustainable World Energy Outlook, ISBN: 978-90-73361-92-8).
La primera edición de este Escenario fue publicada en el 2005, con revisiones
en 2007, 2008 y 2010. Esta versión 2012 presenta un camino fundamental y
consistente para protegernos del Cambio Climático por el uso de energéticos: llevar
al mundo de donde se encuentra a una situación donde ya no se utilizan combustibles
fósiles, no se emita CO2 y se alcanza la seguridad energética.
También, analizaron las medidas necesarias en el tiempo para que no se requiera
la exploración de petróleo en el Ártico, la peligrosa perforación de pozos
petroleros muy profundos en el mar y la contaminante extracción de gas de
esquistos bituminosos del subsuelo.
La
seguridad en el abastecimiento de energéticos es el tema prioritario de la
agenda de política energética, tanto desde el punto de vista de acceso a
recursos naturales como del de financiamiento, indica el Reporte. Las recientes
fluctuaciones en el precio del petróleo se deben a la combinación de muchos
eventos; sin embargo, una causa importante es que las reservas convencionales probadas
de hidrocarburos son más escasas y aumenta su costo de producción. Algunos productos
no convencionales como el petróleo de arenas alquitranadas y el gas de
esquistos bituminosos se han vuelto económicos pero con consecuencias
devastadoras para el ambiente local. En cambio y de acuerdo al último reporte
especial sobre energías renovables del IPCC (Panel Intergubernamental para el
Cambio Climático, en español), las reservas de energías renovables son
accesibles técnicamente a nivel global y pueden proveer más de 40 veces la
energía que el mundo consumo hoy. La reducción en los últimos años de los
costos en las tecnologías eólica y fotovoltaica ha cambiado ya fundamentalmente
la economía de las energías renovables.
El
Reporte señala que el cambio en la forma que consumimos y generamos energía
debe comenzar inmediatamente y estar seriamente implantado en los próximos diez
años para evitar los peores impactos del Cambio Climático. Los cinco principios
claves para transformar la producción, distribución y consumo de energéticos
son: impulsar los sistemas descentralizados y la expansión de redes
inteligentes en el campo de la electricidad; respetar los límites naturales del
ambiente; eliminar paulatinamente las fuentes de energía sucias y no
sustentables; crear mayor igualdad en el uso de recursos, y desacoplar el
crecimiento económico del consumo de combustibles fósiles.
El
escenario revisado [R]evolución Energética planteado en este Reporte describe
las siguientes acciones necesarias para alcanzar una oferta de energía
sustentable, reduciendo el uso de recursos convencionales de hidrocarburos y de
uranio, y sin tener que emplear en el camino a los recursos no convencionales
de hidrocarburos: controlar la demanda de electricidad, reducir la demanda de
calor de proceso, impulsar la economía verde, fomentar un desarrollo dinámico
de los mercados de energías renovables, fortalecer el desarrollo tecnológico que
garantice una reducción en los costos de producción con energías renovables,
remplazar con tecnologías de fuentes renovables a las plantas de potencia
eléctrica que se vuelvan obsoletas y a las nuevas necesarias, considerar
plenamente la reducción en los costos de combustibles en las proyecciones
financieras y económicas de futuras obras energéticas, y revisar cuidadosamente
las estrategias de desarrollo en el campo de las tecnologías que producen calor
de proceso ya que será necesario un crecimiento enorme en las instalaciones
solares térmicas, geotérmicas y de bombas de calor.
Si se toma una trayectoria
tecnológica que use fuentes renovables de energía en vez de continuar empleando
energéticos convencionales, el Reporte describe dos resultados muy importantes:
el primero, es sobre una mayor creación de empleos en el sector energético y,
el segundo, es el importante ahorro de energía debido a la electrificación de
los vehículos.
En Morelos, el gobierno
estatal debe, a través su Comisión de Energía, considerar algunos de los
cambios de política sugeridos en el Reporte: por ejemplo, establecer e incrementar
paulatinamente impuestos al uso de combustibles fósiles consumidos en el estado,
incorporar los costos sociales y ambientales en la evaluación de proyectos
energéticos, fijar normas de eficiencia energética a todos los equipos,
vehículos y edificios, imponer metas anuales en el uso de energías renovables y
sistemas de cogeneración, requerir obligatoriamente las etiquetas informativas
sobre el impacto ambiental de cualquier equipo o sistema, y aumentar
significativamente los presupuestos a proyectos de investigación, desarrollo e
innovación en energías renovables y ahorro de energía.