publicado en La Jornada Morelos el 24 de agosto de 2015.
La baja en el precio del petróleo ha sido impulsor del desarrollo económico en los países que lo importan y ha tenido efectos negativos en los países exportadores en los que dependen sus ingresos de la venta del mismo. Realmente, el precio del petróleo ha caído más del 60 por ciento desde fines de junio de 2014, alcanzado el valor que tenía el 3 de marzo de 2009, de 39.44 dólares por barril (http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2015/08/21). Para México, esta caída tiene consecuencias muy serias para nuestra economía. El gobierno mexicano tuvo que contratar coberturas petroleras a un precio de 49 dólares por barril para “asegurar los ingresos petroleros ante una mayor caída en los niveles del precio promedio de la mezcla mexicana de exportación y permitir una mayor certidumbre para la deliberación y, en su caso, aprobación de la Ley de Ingresos de la Federación 2016” en el Congreso de la Unión, informó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Para el pago de dicha cobertura se utilizarán parte de los recursos acumulados en el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP). El costo de los contratos para garantizar este precio mínimo de la mezcla de petróleo de exportación suma mil 90 millones de dólares, es decir, alrededor de 17 mil 503 millones de pesos (http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2015/08/19).
Asimismo, la SHCP aseguro que para mantener el compromiso de no aumentar los impuestos y mantener la trayectoria decreciente del déficit, el ajuste tendría que venir con un recorte en el gasto del gobierno para sobrellevar la caída en los precios del petróleo” (http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2015/07/31).
Por lo tanto, es fundamental entender qué causa la volatilidad en los precios del petróleo y para ello Bassam Fattouh nos presenta los tres métodos más utilizados (“The Drivers of Oil Prices:
The Usefulness and Limitations of Non- Structural Model, the Demand–Supply Framework and Informal Approaches, March 2007. http://www.cefims.ac.uk/documents/research-64.pdf. Consultado en 20150821): Economía de los recurso agotables, donde se concluye en general que estos precios deben exhibir una tendencia a la alza; Esquema de oferta-demanda, donde el Mercado petrolero se modela utilizando ecuaciones de comportamiento que ligan la demanda y oferta de petróleo con sus determinantes principales; y la aproximación informal, donde se identifican los factores incidentales, económicos y geopolíticos que afectan la oferta y demanda y, entonces, los movimientos los movimientos de los precios dentro de contextos y episodios específicos en la historia del mercado petrolero. También, Fattouh recopiló, de la literatura especializada, una lista amplia de determinantes principales: “fuerte demanda de los países de la OCDE, falta de capacidad de reserva, cuellos de botella en la distribución, respuestas de la OPEC a la oferta, choques climáticos y geopolíticos, y el incremento en la importancia de los especuladores y comerciantes”.
Otros autores han establecido diversos ejes claves que determinan el precio del petróleo (ver por ejemplo, Brook, A. et al. (2004), “Oil Price Developments: Drivers, Economic Consequences and Policy Responses”, OECD Economics Department Working Papers, No. 412, OECD Publishing.
http://dx.doi.org/10.1787/303505385758): Dependencia global en los hidrocarburos, como principal energético primario en el futuro, tanto para los países de la OCDE como para la industrialización de los emergentes; Necesitar la oferta de la OPEC, debido a los mecanismos de distribución ya establecidos y a las enormes reservas probadas que tienen, del orden de las dos terceras partes del total mundial; Incremento gradual del precio de equilibrio de petróleo en las próximas décadas, ya que las nuevas reservas, sobre todo de productos no convencionales, tendrán un mayor costo de exploración, desarrollo y producción; Supuestos que se asuman sobre el crecimiento económico y la intensidad energética, en particular de China y otros países emergentes; Interés de la OPEC en aumentar su producción, debido a su interés por tener una mayor fracción del mercado para financiar su propio desarrollo y el de sus aliados; Volatilidad de los precios en el corto plazo, ya que aumenta el riesgo de las inversiones y reduce el monto de los capitales disponibles; Cuellos de botella en el transporte, ya que cambios geopolíticos en la oferta han incrementado la presión en la operación de la flotilla de tanqueros; Relajación del efecto de los precios en la inflación de los países de la OCDE, ya que los bancos centrales han aplicado políticas monetarias para controlarla que son independientes del consumo energético; Implantación de impuestos a los combustibles, que ha reducido el impacto en los precios por cambios bruscos en la oferta o demanda; y políticas que promuevan el desarrollo de mercados, como la transparencia en contratos, reducirían la incertidumbre y propiciarían la inversión.
En Morelos, debemos conocer el impacto de las políticas energéticas en nuestras áreas prioritarias para el desarrollo industrial y, simultáneamente, avanzar en la transición energética a las energías renovables que nos permitan una economía desligada del mercado de los hidrocarburos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario